TRÃNSITO DE PIEL
CLIMAS
Te recuerdo vencida por el frÃo, reacia, como siempre,
a un clima diferente al de Madrid.
La distancia a Castilla era verte arrugada en el silencio,
exagerando el frÃo para que te abrazara.
Era fácil, entonces, hablarte de mi infancia,
de los inviernos largos de la nieve, de las calles heladas,
y del frÃo. El colegio cerraba durante algunos dÃas
a causa de la nieve. Aquella sensación de libertad,
de fiesta inesperada flotaba por las calles,
igual que en el verano…
He conservado siempre la misma gratitud hacia el invierno.
Su dureza y su frÃo, su claridad al mundo,
su blanca transparencia… dejaron huella firme en mi carácter.
Son climas muy distintos, dijiste tan despacio, con la mirada rota,
como si aquella frase pudiera prever nuestro destino,
el final de otra historia
cerrada por la nieve…
 
 
Todas las deserciones que provoca la noche
en nuestro cuerpo tienen la marca inútil de otra vida,
porque el cuerpo ha cambiado, y somos otros.
Los horarios baldÃos, las tristes aduanas de la noche,
exigen adaptarse a sus costumbres
igual que en un paÃs desconocido.
El tiempo te ha cambiado.
Hemos envejecido. La música es distinta,
ni siquiera, al alcohol, mostramos tolerancia.
… Resultan necesarias todas las deserciones…